Restaurante Paralelo Cero, descubre la alta cocina ecuatoriana en Madrid

Restaurante Paralelo Cero, descubre la alta cocina ecuatoriana en Madrid

Viajar, viajar, viajar… Si estás contagiado de ese bendito virus trashumante que te hace soñar continuamente con nuevos horizontes, buscarás mil modos para hacerlo. Robándole horas y días al calendario, a través de documentales, leyendo blogs de viajes como éste o reservando mesa en restaurantes que te permitirán recorrer el mundo bocado a bocado. Cualquier excusa se vuelve válida para saciar un apetito que solo piensa en devorar destinos. En esta ocasión, olvídate del pasaporte y la maleta. No vas a necesitarlos. Vamos a trasladarnos a Ecuador sin salir de Madrid en una escapada gastronómica pilotada por el gusto, el olfato y la vista. ¿Dónde? En el restaurante Paralelo Cero.

Nuestra puerta de embarque para bucear en la despensa ecuatoriana está situada en el barrio de Salamanca, junto al Parque del Retiro y la Puerta de Alcalá. Allí nos espera un local que sin grandes artificios y con una decoración eminentemente blanca y actual consigue su propósito: crear un ambiente cálido y acogedor que nos permite escapar del frenético y bullicioso ritmo de vida de la capital nada más cruzar su puerta.

Antesala del comedor. Restaurante Paralelo Cero

Restaurante Paralelo Cero

Al frente de este navío que cruza el océano hasta Sudamérica está su chef y director, Miguel Xavier Monar, un maestro en el arte de revisar las recetas ancestrales de la cocina ecuatoriana con propuestas vanguardistas que no ocultan su origen. Cada plato lleva su sello personal, su particular visión de las gastronomía de un país andino que sabe a tamal, a yuca, a hornados, a chorizo criollo y a excelentes carnes y pescados. Y es que desde que Monar se puso al frente de este negocio, la trayectoria de Paralelo Cero ha ido in crescendo hasta convertirse en lo que es ahora, el único restaurante de alta cocina ecuatoriana de España. Un lugar de culto para los amantes de la buena mesa que buscan sorprenderse y deleitarse con nuevos sabores e innovadoras presentaciones.

Siguiendo sus propias indicaciones -como buen anfitrión de su tierra le encanta recibir a sus comensales-, opté por descubrir el exotismo y la magia que sale de sus fogones de la mano de su menú degustación Ecuador exquisito, un viaje culinario de nueve propuestas tan sorprendente como grato para el paladar.

Para abrir el apetito, llegó hasta mi mesa un canelazo, una infusión de canela, clavo y pulpa de naranjilla con aguardiente de caña de azúcar ecuatoriano, que a modo e antesala despertó mis sentidos antes de sucumbir a su plato estrella: el ceviche. Sin ser una experta en la materia, te puedo asegurar que son de los mejores que he probado. Tanto el de corvina -cocido al momento con zumos de naranja, limón y lima-, como el de camarones que se sirve en su propio caldo con chips de plátano macho (chifles) y mini maíz tostado (chulpi).

Ceviche de corvina y ceviche de camarones. Restaurante Paralelo Cero

Otro clásico de Paralelo Cero es el atún rojo con frutas tropicales, presentado en daditos tipo tartar con aguacate especiado y acompañado de huevas de salmón y chips de legumbre. Exquisito.

Atún con frutas tropicales. Restaurante Paralelo Cero

Tras paladear una copa de espumoso de frutos rojos que consigue transportarte a los volcanes de Ecuador, llega el momento de las carnes con recetas tradicionales como el llapingachos classic, típico de los pueblos indígenas, y el seco de gallina preparado con crema de guayaba tropical, tempura de yuca y acompañado por un suave puré de patata.

Llapingachos classic. Restaurante Paralelo Cero

Seco de gallina con guayaba. Restaurante Paralelo Cero

Mención especial merece el hornado de chancho asado en cerveza Kichwa, una pierna de cordero macerada en esta cerveza rubia artesana, tipo Ale, creada por los cerveceros de Sagra y el propio chef, que solo se puede tomar en este restaurante. Exclusivo, original y gustoso. ¿Se pude pedir más?

Hornado de chancho asado en cerveza Kichwa. Restaurante Paralelo Cero

Pues sí. ¿Qué tal soñar con callejear por Quito a través de un rissotto? También es posible probando su quinoto, un pseudo-cereal, llamado quinua, salteado con champiñones, crema de leche, queso rallado, cebollino picado y el toque de polvo del chulpi.

Quinoto. Restaurante Paralelo Cero

El dulce colofón a este itinerario gastronómico, que refleja con ingenio y sensibilidad la cultura gastronómica de Ecuador, realmente fue una sorpresa: una suculenta mezcla de plátanos maduros cocidos en almíbar de caña de azúcar. Imposible resistirse.

Chucula de plátanos maduros. Restaurante Paralelo Cero

Respecto al servicio, solo señalar que está a la altura de cuanto se sirve en las mesas. Atento y cercano, resolverán todas tus dudas para convertir tu paso por este restaurante en una apetitosa experiencia que a buen seguro desearás repetir ya sea a la hora de la comida, la cena o disfrutando en cualquier momento del día de su cocina non-stop.

Yo ya tengo excusa para volver. Me queda mucha carta por recorrer y no he probado sus famosos cócteles de autor entre los que destacan el Pisco Sour Blue, el Gin Violet y Doña Margarita. Ecuador, de momento, sigue siendo para mí una quimera. Disfrutar de su gastronomía contemporánea, una realidad en el centro de Madrid.

Dónde: Calle Villanueva 21, 28001 Madrid. Reservas: 915 776 926

Horario: Lunes de 13:00 a 17:30h.  Martes a sábado de 13:00 a 17:30  y de 20:30 a 00:00h. BeforeHome: Martes a viernes de 17:30 a 21:30 h.

Cómo llegar: Metro Retiro (línea 2)

*Precio del menú degustación Ecuador Exquisito: 25€ por persona (no incluye pan ni bebida)

Catering Chinchón: una experiencia gastronómica tan sorprendente como deliciosa

Catering Chinchón: una experiencia gastronómica tan sorprendente como deliciosa

En esta ocasión no voy a recomendarte un restaurante como es habitual en esta sección. Voy a hablarte de una experiencia gastronómica que pude disfrutar la semana pasada. Y es que la agencia de comunicación RV Edipress tuvo a bien invitarme a la presentación de la nueva carta de Catering Chinchón, una de las empresas más importantes de catering de nuestro país. El escenario elegido no podría ser otro que Chinchón ya que fue en esta preciosa localidad del sureste de la Comunidad de Madrid donde nació Miguel Fernández, máximo responsable de este innovador proyecto de cocina fusión y de vanguardia.

Plaza Mayor de Chinchón Tras una visita guiada a los principales puntos de interés de Chinchón (de los que hablaré en un futuro post), nos dirigimos hasta Chinchón Ochenta, uno de los bares de copas más populares de esta localidad. Hablo en plural porque pude disfrutar de esta jornada de turismo y gastronomía en compañía de otros periodistas y blogueros entre los que se encontraban una de mis parejas viajeras favoritas, Edu y Érika de Edu & Eri Viajes.

Fue en este acogedor local donde asistimos a un desfile de formas, colores y sabores realmente sorprendente. Cada bandeja que aparecía ante nuestros ojos retaba a nuestro paladar en un divertido juego de adivinanzas. ¿Una galleta Oreo? Su forma exterior así lo sugería pero en realidad eran unas pequeñas rodajas de morcilla y queso. ¿Un Ferrero Rocher? Sí, pero de queso de cabra y arándanos. ¿Un bocadillo de panceta? Exacto, pero sobre yuca y virutas de tomate seco. Como ves, ingredientes de toda la vida que en las manos del equipo de Catering Chinchón se transforman en creaciones únicas, originales y, sobre todo, sabrosas.

Ferrero Rocher de queso de cabra y arándanos. Catering Chinchón

Panceta de Domingo sobre yuca y virutas de tomate. Catering Chinchón

Escobas de queso barriendo sobrasada y ajetes. Catering Chinchón

En más de una ocasión, tuvimos que recurrir al propio Miguel Fernández para que nos desvelara los ingredientes de deliciosos bocados como la flor de hibiscus rellena de crema de queso o el papel de violeta sobre una royal de boletus.

Flor de hibiscus rellena de crema de queso

Papel de violeta sobre una royal de boletus. Catering Chinchón Tampoco faltaron en esta degustación platos tan castellanos y contundentes como las migas y el solomillo de buey, y pescados y mariscos reinventados bajo el sello Catering Chinchón, que antes de satisfacer nuestros estómagos nos sedujeron con su cuidada presentación. ¡25 años de experiencia en los fogones dan para mucho!

Lomo de jabalí con patatas y cebollino. Catering Chinchón

Medallón de solomillo de buey. Catering Chinchón

Otra exquisitez del Catering Chinchón

Carabinero con corteza de cerdo en chupito de cabracho. Catering Chinchón

El colofón a este festival gastronómico llegó con los postres. Confieso que no los probé porque no soy muy de dulces y además era incapaz de comer más, pero a tenor de los comentarios te puedo asegurar que estaban riquísimos.

Postres de Catering Chinchón

Y hasta aquí mi experiencia gastronómica con Catering Chinchón. Si con mis palabras he despertado tu curiosidad y las ganas de probar cómo la cocina tradicional puede transformarse en cocina de vanguardia con ingenio y buen saber hacer, misión cumplida.